Después de mucho pensar y buscar, encuentras el outfit idóneo para la ocasión. Todo marcha sorprendentemente bien, tu cabello brilla naturalmente, no batallas para peinarte, y la piel de tu cara luce magníficamente radiante… hasta que llega el momento de maquillarse. Abres tu cosmetiquera y ¡sorpresa! Tu rubor se rompió, o peor aún, la tapa […]